
Todos los lasallanos y lasallanas del mundo transitamos un año especial, el “Año de la Espiritualidad”. 2025, Año Jubilar de la iglesia, nos encuentra como Hermanos y Hermanos haciendo camino en la sinodalidad para la transformación subjetiva y comunitaria, buscando el rostro de Jesús en cada uno de nosotros, tal como reza nuestro lema anual.
¿Por qué un año de espiritualidad?
Conscientes del Año Jubilar por venir, en el último Capítulo General del Instituto, nuestros delegados decidieron “dedicar el año 2025 a profundizar y compartir la espiritualidad lasallana, con motivo de la celebración del 300 aniversario de la Bula de Aprobación” (46° CG, 2.1). Motivó esta iniciativa, además, el 75° Aniversario del patronato de La Salle para los educadores cristianos de todo el mundo. Este conjunto de hitos concluyó en la propuesta de re-explorar y compartir este tesoro, nuestra propia espiritualidad como miembros de una comunidad global que se hace singular en cada localidad en que tenemos presencia.

¿Qué es la Bula de Aprobación?
Se trata de un documento pontificio de 1725 que concedió al Instituto de los Hermanos, por entonces una pequeña comunidad, el reconocimiento civil por parte del rey de Francia y, jurídico-eclesial por parte de la Santa Sede. Si bien es un documento muy relevante a nivel histórico e institucional, es poco conocido por los lasallanos. En él, se ponen de relieve algunos elementos de nuestra identidad que están en el fondo del desarrollo de estos trescientos años.

En nuestra tradición espiritual, espiritualidad y misión son indisolubles, del mismo modo que educación y evangelización. La nuestra es una espiritualidad unificadora (Regla 63) que nos lleva al encuentro, a la contemplación y a la conformación con Jesucristo (Regla 65). Invitamos a todos los lasallanos a conocer más sobre nuestra historia e identidad, visitando aquí también el material que viene produciendo nuestro Instituto.
La Salle, Patrono Universal de los Educadores Cristianos
El 15 de mayo de 1950, el Papa Pío XII, reconociendo su aporte a la Iglesia y al ámbito educativo, declaró a San Juan Bautista de La Salle “Patrono Universal de los Educadores”. Por ello, este año celebramos su 75° aniversario y nuestra manera de vivir el evangelio en el mundo de la educación.

Como parte de las campañas para integrar a la comunidad global de La Salle, el Instituto lanzó el concurso “Ser educador hoy”, con el objetivo de hacer visible el legado inspirador de nuestro Fundador y dirigido a estudiantes, educadores y familias que hacen parte de nuestras comunidades y obras.

Nuestro Lema 2025
Dialoga con este año espiritual, ya que nos invita a seguir profundizando en nuestra identidad más auténtica: ser hermanos y hermanas. El inicio de la frase da continuidad a los dos años anteriores y la segunda parte nos interpela a una nueva reflexión.
Para nosotros, lasallanos y lasallanas, el lema sintetiza las convicciones que atravesarán nuestro hacer en la escuela, en las aulas, en el patio, en la capilla y más allá de la escuela: en el barrio y en la sociedad. Aquí y allí, buscaremos ese Rostro de Dios en los rostros de los hermanos y hermanas, los cercanos y lo más lejanos, haciendo ensayos de fraternidad. Buscar es un verbo activo, que nos hace protagonistas, salimos a buscarlo, como comunidad, como la Iglesia en salida que vamos siendo de la mano de Jesús, también él buscador del rostro del Padre y los rostros de la humanidad sufriente. Para Lévinas, filósofo del siglo XX, el rostro del otro desafía al yo. La mirada de los otros nos deja ver la fragilidad y nos convoca a una responsabilidad fraterna, que siempre exige de nuestra parte una respuesta ética; así también lo entendemos desde nuestra espiritualidad: el otro, los otros nos comprometen a una transformación que nace del estilo de Jesús. Esto implica participar e interactuar con todo agente involucrado y actividad que promueva la espiritualidad personal y comunitaria.
¡Te invitamos a ser parte y celebrar juntos y juntas este año especial!
